IZQUIERDITIS VISCERAL: SECTARIOS MEDIOCRES

En mi ciudad, y supongo que en otras, se ha convocado una concentración para protestar contra la xenofobia, el racismo, y por supuesto, el FASSSSSCISSSSSSSSSSSMO

Ya saben, la misma cantinela de siempre que se utiliza desde la intolerancia de la izquierda visceral, llena de indocumentados. Manipuladores, unos pocos, manipulados e indocumentados, la mayoría que se deja sorprender por cuatro estupideces que les dicen o que han leido en cualquier pasquín, folleto o bazofia bibliográfica.

Sesgados por el mismo sectarismo que los fascistas, a los que ellos dicen oponerse; sectarios, y mas peligrosos, como se ha demostrado el sabado pasado en Barcelona. En Madrid, no paso nada porque la policía estuvo requisando hasta 62 armas blancas, de esas que cualquiera lleva a toda hora en la cartera, en el bolso o en el bolsillo trasero del pantalón. Si, como quien lleva el mechero o un boligrafo, pues un arma blanca siempre viene bien- sobre todo si es para atacar a un fascista-

Estos indocumentados con tanta sensibilidad social siempre buscan en la canalla sociedad capitalista las motivaciones de muchos conflictos y comportamientos incivicos y violentos, o a problemas como el fracaso escolar, la drogadicción, etc. Sin embargo, no son capaces – o no quieren- pensar por qué han surgido estas bandas de ultra derecha. No son capaces de evaluar las causas sociales de que surgan estas bandas, partidos o grupos, o por qué han tomado fuerza. Solo son capaces de esgrimir las motivaciones socioeconomicas para explicar los conflictos sociales cuando les conviene a su ideología y a su secta.

Ellos son los culpables con sus modas y sus ideologías educativas – generadores de imbeciles sin remedio, sus progresías, sus teorías sociales propias de mediocres sin mas perspectiva que crear parasitos y mendigos de la subvención; ellos son los culpables cuando legalizaron el consumo de la droga – prohibiendo el trafico-; hipócritas de medio pelo, con su política irresponsable de educar en la irresponsabilidad, en el no esfuerzo, en el miedo a la frustración por tener que trabajar y esforzarse: ellos son los culpables, ellos han producido toda esta situación; si, ellos, pusilánimes, con su buenismo y su estupidez son los que han hecho que se produzcan estos grupos surgidos de la marginación, que tanto les preocupa.

Y a los fascistas y la ultraderecha, mas les vale ser mas inteligentes y no quitar votos al partido popular. Tal y como estan las cosas, es necesario con urgencia evacuar la Moncloa de sus actuales inquilinos.

Finalmente me pregunto por qué ser fascista es malo, malísimo, es como ver al demonio, y ser comunista y seguidor del Che es ser todo lo contrario y bien visto. Esta pregunta ya detecta que la sociedad es absolutamente estupida. Sinceramente, con estas perspectivas y con una sociedad asi de estupida, que es capaz de seguir votando a Z, no queda muchos animos de alentar la democracia.